… y para bien o para mal, tú eres la mente creativa detrás de tu vida y tu racha no concluye hasta que tú lo decidas. Siempre pensamos que “este será nuestro año”, pero ¿qué tal si esta vez sí lo creemos? Unámonos y manifestemos, que poder es lo que tenemos.
Dejamos atrás las interacciones intrusivas que intentan robarse el escenario de nuestra zona de sanación y abrimos las puertas a un año lleno de respeto al espacio propio y, por supuesto, a la vida ajena. ¡Porque merecemos vivir en un mundo donde se respete la magia de la auto-sanación y la sutil maestría de los límites establecidos!
Que cada interacción sea un ritual de nutrición y purificación, inundándonos de dicha y serenidad. Honrémonos al elegir estar donde y con quienes nos hagan sentir genuinamente bien. Y que la magia de nuestras decisiones nos lleve a las sensaciones más extraordinarias.
Extendamos el poder del amor, tanto hacia nosotros mismos como hacia los demás. Con el poder de nuestra autenticidad, desafiamos los juicios y prejuicios, y celebramos la diversidad y abrazamos la humanidad en su plenitud.
Que el perdón y la comprensión sean nuestros hechizos liberadores. Porque debemos recordar que todos estamos en distintos niveles de evolución, y el perdón es la llave que abre la puerta a la paz interior. Perdona por ti, no por el otro.
Tenemos una vida colmada de evolución y paz. Porque todos merecemos vivir en armonía; la magia reside en cada uno de nosotros, y ha llegado el momento de liberar nuestro poder. Siempre decimos que «este año será nuestro año». Pero esta vez, lo creemos con convicción y mantenemos la idea sin importar lo que suceda. Este año es tuyo, y san se acabó.
Atte. Merlina Verruckt